martes, 1 de marzo de 2011

DOS BICICLETAS EN EL CAMINO


DOS BICICLETAS EN EL CAMINO


Dos bicicletas en el camino. Ella vestida de novia. Él con el torso desnudo cubierto apenas por un jaquet, pantalón, zapatos de charol. El solitario camino era como una cinta transportadora donde  ellos quedaban quietos y se movía el paisaje. Llegar a la iglesia para casarse. Él la pensaba desnuda y el deseo  de poseerla. Ella imaginaba su casita, su cama de sabanas blancas de hilo perfumadas; los niños jugando en el parque, los columpios agitando el aire mientras regaba la sed de las margaritas. Es pronto aún insistió, falta la consagración divina de la eternidad del amor.  Las flores, la entrada triunfal con los acordes de un gran órgano ejecutando la marcha nupcial. La simbólica entrega de los anillos. El beso. El defendía su urgencia. Debía ser ahora, se lo exigía el ignorado motor.
El paisaje los registraba cada momento, no dejaba de mirarlos. Animales de pastoreo no hubieran permitido detenerse y hacer el amor en su mesa de comida. Debían escapar para consagrarse. Dios se lo había enseñado.
Era primavera. Las flores elegirían a quienes las visitaran hasta hallar un hermoso fecundador.  Lo harían por su belleza, o por su talento. Se pintarían con colores para atraer la ansiedad de la glucosa.
Ella siguió pensando rodeada de un hálito de futuro. Sábanas perfumadas de lavanda, bebes libando de sus pechos, regalando su calor de vida.
Él aguantó la ceremonia hasta el final, por respeto, por tradición,  hasta  que  un impulso  de la naturaleza lo condujo a su burdel habitual. Allí se confesó y se comulgó hasta la madrugada, hora en que se satisfacen las angustias y se exacerban los deseos.
Ella lo esperó envuelta en sus sábanas blancas de hilo perfumadas.

ALBERTO FERNANDEZ

albertofernandez@speedy.com.ar







































1 comentario:

  1. ME PARECIÓ MUY BUENO ESTE CUENTO DEL ABSURDO.LA MUJER EN SU VISIÓN DE FUTURO Y SEGURIDAD Y UN HOMBRE VICTIMA DE SU PRESENTE GLANDULAR. ROBERTO

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